Una sonrisa se esconde tras una lágrima,
De a poco aprendo a salir de esta soledad,
vuelvo a encontrar mi camino hacia la felicidad.
¿Serán de nuevo otros ojos
los que lograran volverme a enamorar?
El destino va haciendo aparecer mi camino,
ya casi logro ver un final.
Vuelvo a ser feliz,ya empece a salir a flote.
Tal vez el no esperar a nadie
ha logrado traer a estos brazos
un amor inesperado tal como lo hizo la última vez.
Pero no sirve de nada ilusionarse por placer,
uno se cansa de esperar,es un tormento en soledad.
Cuanto te extraño,anhelo,
contigo me sentía en el cielo.
Y de pronto como mi felicidad se esfumó,
nada ni nadie sabia que fue lo que pasó.
Aún quedan preguntas rondando en mi cabeza,
la esperanza me llena y confunde,la locura asume
y nutre miedos que no olvido,
¿Será casualidad o consecuencia del destino?
Merodeador
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